25 marzo 2019
El principio del “sufragio efectivo” es esencialmente democrático. Si no se cumple, es imposible determinar la voluntad mayoritaria y establecer un gobierno legítimo. Pero sin la “no reelección”, principio esencialmente liberal, ese mismo mandatario puede caer en la muy humana tentación de perpetuarse en el poder, sepultando a la democracia.