Recuerdo nítidamente aquella noche del 25 de febrero de 1964. Cassius Clay era nuestro ídolo, adorábamos su estilo, sus ocurrencias, sus gestos, su magnífica estampa, su alegría.
Los edificios de Teodoro son como islas de solidez y serenidad en el naufragio de la ciudad, enclaves perfectamente funcionales de tradición y modernidad. Hay en su obra una incesante voluntad de renovarse, de hallar un lenguaje propio, personal.
El próximo 10 de marzo se cumplirán cuarenta años del fallecimiento de Daniel Cosío Villegas, uno de los pocos mexicanos a quienes el respetuoso "Don" que les fue dado en vida sobrevivió a la muerte.
Lorenzo Servitje, espíritu religioso y hombre de empresa, acaba de cumplir 97 años. Hacedor de pan, conoce bien sus Evangelios: "no sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios".
Nunca agradecemos suficiente la obra de los maestros y autores que alumbraron el camino. Hoy recuerdo a Moisés González Navarro, historiador eminente, fallecido el pasado 10 de febrero.