Lupa ciudadana: segunda fase
La elección del 2006 despertó una energía social extraordinaria. Mucha gente a la que no le interesaban los asuntos públicos se vio de pronto envuelta en acaloradas discusiones con amistades, familiares o desconocidos. Ahora, muchos se hacen la misma pregunta: después de la elección, ¿yo qué puedo hacer, cómo puedo participar?
Hace exactamente un año, en la revista Letras Libres nos dimos a la tarea de desarrollar un sitio de Internet que permitiera canalizar una parte de esa energía social. Para ello fundamos Lupa Ciudadana. Bajo la dirección de Fernando García Ramírez y con el trabajo entusiasta de un grupo de jóvenes, Lupa Ciudadana se dedicó a poner a disposición general y criticar, los discursos y las promesas de los candidatos presidenciales. Al término de la elección, la afluencia de visitantes (más de millón y medio de visitas durante el período de las campañas) nos impulsó a desarrollar la segunda fase de nuestro proyecto.
En esta segunda fase hemos reunido, en uno solo, tres sitios en la red: el primero, dedicado al Poder Ejecutivo, el segundo al Legislativo, y otro más al Gobierno del Distrito Federal. Cada uno ofrece un cúmulo de información: declaraciones, noticias, indicadores, estadísticas comparativas, presupuestos, etcétera. Asimismo, brinda espacios para que el ciudadano participe mediante sus denuncias, observaciones, propuestas y críticas, contribuyendo así a transparentar, vigilar y calificar a los integrantes del poder público.
El usuario ideal de Lupa Ciudadana es el ciudadano común y corriente, pero el sitio aspira a ser un instrumento de particular utilidad para los medios de comunicación (diarios, revistas, radio, televisión). En una palabra, un medio de medios. En Lupa Ciudadana, el usuario podrá encontrar (gratuitamente, sin ningún trámite) información detallada de todas las Iniciativas de Ley que se presenten tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores, desde su ingreso hasta su eventual aprobación; también información puntual de todos los diputados y senadores (una semblanza o currículo, asistencia, intervenciones, iniciativas, relación con sus distritos, etcétera); las declaraciones, noticias e indicadores generados por cada una de las secretarías, tanto del gobierno federal como del gobierno del Distrito Federal. Habrá además evaluaciones y calificaciones del Presidente y sus secretarios de Estado, así como del Jefe de Gobierno del DF y de sus respectivos secretarios, todo esto a cargo de un numeroso y calificado grupo de especialistas.
Más allá de esta función informativa y crítica, el propósito central de Lupa Ciudadana es hacer del ciudadano pasivo un activo vigilante de las instituciones y de quienes las encabezan: de las Cámaras legislativas federales y de nuestros representantes. Para alcanzar este fin, desarrollamos diversos instrumentos y programas. Destacamos cuatro: "Vigilancia ciudadana", "Catálogo de mordidas", "Gestión de transparencia" y "Escríbele a tu funcionario".
"Vigilancia ciudadana" es un programa en el que los usuarios podrán inscribirse para poner bajo la lupa a nuestros funcionarios federales, capitalinos o a nuestros legisladores federales. ¿Cómo funciona? El usuario se registra y revisa los dichos y hechos del funcionario o legislador elegido, a través de los múltiples elementos que proporciona el sitio. Este seguimiento le da derecho a emitir una calificación mensual sobre las acciones del funcionario o legislador. El vigilante ciudadano no sólo califica: una de sus obligaciones y derechos es solicitar información del área donde labora el funcionario que decidió poner bajo su lupa, y fomentar la denuncia ciudadana de posibles actos de corrupción.
"Transparencia". Mediante este instrumento el usuario ciudadano puede solicitar gestiones de transparencia de todas las actividades que realice el gobierno federal, el gobierno del Distrito Federal y el Poder Legislativo federal. Los trámites de transparencia que se lleven a cabo por la gestión de Lupa Ciudadana se publicarán en nuestras páginas.
"Catálogo de mordidas". En las páginas de Lupa Ciudadana aparece una sección en la que el usuario puede registrar actos de corrupción gubernamentales, sufridos o atestiguados por él mismo. Este catálogo pide al usuario que describa la falta (identificando a sus actores, el lugar, la oficina...) y el monto de la mordida.
"Escríbele a tu funcionario". Desde Lupa Ciudadana, el usuario puede entrar en contacto no sólo con el servidor que encabeza cada dependencia sino con todo el sector público: federal, estatal y municipal (cien principales ciudades); con los tres poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) y toda clase de empresas públicas, organismos, comisiones, fideicomisos, institutos, universidades, partidos. Lupa Ciudadana brindará los nombres, puestos, teléfonos, fax y correo electrónico de los principales funcionarios.
Nuestro objetivo es el mismo que guió la primera etapa de Lupa Ciudadana: acotar la impunidad de nuestros funcionarios, impunidad manifiesta en los hechos y los dichos. Se trata, en último término, de crear una cultura de la responsabilidad. En una democracia, la labor de la sociedad no se reduce a votar y pagar impuestos: es o debe ser una tarea vigilante y atenta, de crítica y control. ¿Qué nos toca hacer? Informarnos, estar al tanto, alertas, exigir transparencia, imponer procesos de rendición de cuentas, crear institutos de contabilidad social. Sería bueno que, en los estados y municipios, haya grupos ciudadanos que adopten y adapten libremente nuestro concepto y creen sus propias "lupas ciudadanas". Nos toca, en pocas palabras, utilizar los medios modernos de información para ciudadanizar el poder.
El trabajo debe ser cotidiano. La cita es en www.lupaciudadana.com. La próxima meta será el 2009, en ocasión de las elecciones legislativas intermedias. Esperamos para entonces haber aportado instrumentos para que la clase política mexicana se convierta cada vez más en servidora de la sociedad, y deje de actuar, ya para siempre, como propietaria de los puestos públicos.
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