"¿Quieres entender la experiencia histórica de las dos Américas? Lee Benito Cereno de Melville.” Al conjuro de estas palabras de mi amigo y maestro Richard M. Morse, he vuelto a leer aquella novela publicada en 1855.
Tres disciplinas literarias se disputan, como celosas hermanas, el arte de narrar la vida: la historia, la novela y la biografía. No son las únicas ni las más remotas.
En una página lúcida y cruel sobre Antonio Caso, Jorge Cuesta describió la impresión que había recibido al asistir por primera vez a una clase del maestro.
Polonia no es una nación más en mi geografía personal: es el país de mis antepasados y los antepasados de mis antepasados. Mis bisabuelos, abuelos y padres, todos sin excepción, nacieron y vivieron allí.
México tiene una larga historia en las ferias y exposiciones internacionales. Nuestra primera aparición tuvo lugar en Filadelfia, en el marco del centenario de la independencia norteamericana.
En al menos dos pasajes de La democracia en América, Alexis de Tocqueville traza una comparación iluminadora entre la vida política de los Estados Unidos y México.