Pareciera que cada cien años México tiene una cita con la violencia. La guerra de independencia estalló en 1810, costó al menos doscientos mil muertos (5% de la población total) y desplegó una ferocidad extrema.
Si la concatenación jurídica de los hechos conduce a la anulación e invalidez de las elecciones por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la celebración de nuevos comicios y el eventual triunfo de López Obrador, México tendría la experiencia de un redentor en el poder.
Al atestiguar los efectos de la lectura de la historia en Andrés Manuel López Obrador, creo que Valéry fue demasiado piadoso: el sueño de la historia, mucho más que el de la Razón, produce monstruos.
Hoy por hoy, la política mexicana es un teatro (mitad farándula, mitad reality show) trasmitido en vivo por los medios de comunicación y ubicado en el Eje "Los Pinos-Zócalo-Donceles-San Lázaro".
Conor Cruise O'Brien, el gran escritor irlandés que representó a su país ante las Naciones Unidas en el espinoso caso de la independencia del antiguo Congo Belga, recuerda en sus memorias un epigrama que escuchó en los primeros días de su arribo a la organización.