En dos entregas anteriores me he ocupado de aplicar la teoría de las generaciones a la vida política postrevolucionaria, comenzando por el PAN y el PRD.
El filósofo Karl Jaspers acuñó el concepto de "tiempo axial". En México, el historiador Luis González y González aplicó el término a la Reforma (1858-1860) que benefició a la sociedad separando a la Iglesia del Estado.
Según la teoría de las generaciones, los ciclos históricos suelen durar sesenta años. Así, en el orden político nacido de la Revolución Mexicana se dieron cuatro elencos sucesivos.
El PAN cumplirá 70 años en septiembre. Para entender sus graves predicamentos actuales vale la pena mirarlos con la perspectiva histórica de la "Teoría de las generaciones", formulada por Ortega y Gasset en su libro El tema de nuestro tiempo (1923).
En torno a la elección del 5 de julio apareció un nuevo rostro de la ciudadanía, un rostro inconforme con el funcionamiento de nuestro sistema democrático.
Todas las iniciativas cívicas son respetables pero algunas son más respetables que otras. La idea del voto en blanco pertenece a esa segunda categoría.
"Este soldado del pueblo es ya candidato a la Presidencia en 2012", dijo Hugo Chávez ante una multitud extasiada, agregando que lo será "hasta que Dios quiera".